Cada vez es más frecuente encontrarse estos primeros días de septiembre con empleados que sufren el síndrome postvacacional. José Antonio López, el vicepresidente de la Asociación Española de Psiquiatría Privada (ASEPP) ha afirmado que los españoles "pagan a la vuelta de las vacaciones el precio de la cada vez más agresiva civilización que estamos construyendo.
La intensidad de este síndrome postvacional puede poner de manifiesto el grado de satisfacción vital de cada persona. Los síntomas que más se repiten son la sensación de cansancio, irritabilidad, apatía y la difucutad para conciliar el sueño entre otros. En general, estos síntoma suelen desaparecer al cabo de diez días. En caso contrario Lopez afirma que puede ser que "algo no vaya bien en la vida del individuo".
La clave para superar con éxito el síndrome postvacional consiste en ser consciente de que se trata simplemente de un síndrome adaptativo. Como afirma el vicepresidente de la ASEPP, "nos sentiremos extraños con el ambiente e incluso con nosotros mismos unos días y luego pasará".
Alguno de sus consejos son el disfrutar del mes de septiembre: aprovechar las horas de luz al salir del trabajo para realizar alguna actividad al aire libre.
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