Las tareas principales incluyen recibir la mercancía que llega, colocarla cuidadosamente en su lugar dentro del almacén y preparar los pedidos para su envío.
Esto implica seleccionar los artículos correctos, empaquetarlos de forma segura y asegurarte de que estén listos para salir.
También es importante llevar un control exacto del inventario, registrando las entradas y salidas de productos.
Mantener el almacén ordenado y limpio es fundamental para un buen funcionamiento.
Se busca a alguien que pueda levantar y transportar objetos pesados, y que esté dispuesto a trabajar en diferentes turnos, adaptándose a las necesidades del almacén.
Es significativo poder trabajar bien con otros compañeros, especialmente en momentos de mucho trabajo.
Se ofrece un contrato fijo a tiempo completo.