El puesto requiere un profesional de enfermería debidamente titulado y habilitado legalmente para ejercer la profesión. La persona seleccionada se encargará de llevar a cabo diversas tareas que estén directamente relacionadas con su formación, experiencia y cualificación profesional. Entre las responsabilidades, se incluyen la aplicación de tratamientos, el seguimiento de la evolución de los pacientes y la colaboración con el resto del equipo médico. Se busca un perfil proactivo, con capacidad de adaptación y compromiso con la atención y el bienestar del paciente. El tipo de contrato es temporal y la jornada laboral puede ser indiferente, adaptándose a las necesidades del servicio.