Las funciones principales incluyen el montaje del mostrador de carnicería para la exhibición de los productos. También se requiere la recepción de la mercancía, verificando que todo coincida con los albaranes y asegurando que la calidad sea óptima. Dentro de las tareas diarias, se encuentra la producción y manipulación de la carne, lo que implica cortar y limpiar los diferentes tipos de productos. Igualmente importante es la preparación de la presentación de los productos en el mostrador, así como el cuidado y mantenimiento de los utensilios de trabajo, junto con la limpieza y el orden del área de trabajo. Además, se espera que se atienda a los clientes, controlando el estado de conservación y la fecha de caducidad de los productos para minimizar las mermas. También se realizarán pedidos e inventarios, y se colaborará en otras tareas propias de un supermercado, como la reposición de productos, el control de mermas, la organización del lineal, el mantenimiento general, la limpieza y el manejo de la caja. El horario es de lunes a sábado por la mañana, con jornada completa.