El trabajo consiste en recibir a los nuevos pacientes junto con el equipo formado por el psicólogo, enfermero y trabajador social. Parte del trabajo es hablar con los familiares o tutores legales para obtener la documentación necesaria del paciente. En casos de ingresos no voluntarios, se debe entregar un informe psiquiátrico al trabajador social para que lo envíe al juzgado. En colaboración con el psicólogo del centro, se elaborarán informes periódicos para los juzgados, los servicios de salud de las comunidades autónomas y las compañías de seguros médicos privados. También se informará a los familiares del paciente sobre su progreso y cualquier incidencia que haya ocurrido. De igual manera, se atenderán las llamadas de los familiares para responder a sus preguntas o inquietudes sobre la situación psiquiátrica del paciente, así como las dudas de los especialistas de los hospitales a los que acuda el paciente. Además, se explicarán a los auxiliares y celadores las pautas a seguir con los pacientes que hayan tenido alguna crisis o incidencia importante. Se realizarán informes de alta para los familiares y/o el recurso interesado y de destino. Se establecerán protocolos de receta electrónica y desabastecimiento de medicamentos en la comisión de farmacia. Por último, se realizará una valoración periódica de los pacientes a través de entrevistas y observación. Contrato indefinido a jornada completa. Salario entre 50.000 € y 55.000 € brutos anuales.