Las tareas principales incluyen la limpieza diaria de las instalaciones donde se alojan las gallinas, lo que implica retirar las aves que hayan muerto. También se requiere supervisar que los sistemas de alimentación y agua funcionen correctamente, así como el sistema de recogida de huevos. Parte del trabajo consiste en clasificar los huevos según su calidad y tamaño, y luego envasarlos para su posterior distribución. Además, se prestará ayuda en la carga de los huevos en los vehículos que se encargarán del reparto. Al inicio y al final de cada ciclo de producción, es necesario realizar la limpieza y desinfección exhaustiva de las jaulas y las naves para asegurar un ambiente higiénico. Se valorará positivamente contar con permiso de conducir y el carné básico para la manipulación de productos fitosanitarios. El contrato es indefinido, a jornada completa de lunes a domingo. El salario y las condiciones laborales se regirán según el convenio colectivo estatal del sector.