Preparación de pedidos siguiendo las indicaciones proporcionadas, ya sea a través de hojas de pedido o mediante el sistema informático. Esto implica la selección de los artículos correctos y su posterior embalaje adecuado, asegurando que queden bien protegidos para su transporte. También se realiza el etiquetado de los paquetes para su correcta identificación y envío.
El trabajo incluye el control y la verificación de la mercancía, asegurándose de que coincida con las órdenes y de que no haya daños. Además, se realiza la reposición de stock en el almacén para mantener los niveles adecuados de inventario y facilitar la preparación de futuros pedidos.
Es importante mantener la limpieza y el orden en el área de trabajo para garantizar un entorno seguro y eficiente. Se requiere cumplir con todos los protocolos de seguridad y calidad establecidos para asegurar la integridad de los productos y la seguridad del personal.