Las tareas principales incluyen la carga y descarga de mercancías destinadas a establecimientos de hostelería. El trabajo implica seguir una ruta diaria predefinida dentro de la ciudad, asegurando la entrega eficiente y oportuna de los productos. Se ofrece un contrato de tipo indefinido, lo que proporciona estabilidad laboral a largo plazo. La jornada laboral es completa, requiriendo disponibilidad para cubrir el horario establecido para la ruta de reparto.