Las tareas principales incluyen cavar, remover la tierra y nivelar el terreno para asegurar que las áreas agrícolas estén en óptimas condiciones. También es importante mantener la limpieza y el buen estado de todas las instalaciones agrícolas, contribuyendo a un ambiente de trabajo seguro y eficiente. Dentro de las responsabilidades, se encuentra la identificación, el diagnóstico y la solución de problemas o averías que puedan surgir en equipos, máquinas y sistemas. Además, se deben realizar arreglos de roturas y daños en mobiliario e instalaciones, abarcando trabajos de carpintería, albañilería y pintura. Es fundamental llevar a cabo tareas de mantenimiento y reparación de sistemas eléctricos, incluyendo el cableado e interruptores. Se valorará positivamente la experiencia previa en este tipo de trabajos. Se ofrece un contrato laboral de 3 meses con la posibilidad de obtener un contrato indefinido, con jornada laboral completa y salario a convenir.