El trabajo consiste en orientar a los vehículos dentro del aeropuerto, especialmente en situaciones de baja visibilidad o cuando el conductor no está familiarizado con las instalaciones. Es fundamental proporcionar una guía segura y eficiente para evitar cualquier incidente. Parte del trabajo es comunicarse constantemente con la torre de control. Esto es necesario para pedir autorización para moverse entre las pistas, calles de rodaje y las zonas de plataforma. Se debe asegurar que cada movimiento se haga de acuerdo con las normas de seguridad y los procedimientos establecidos. Este es un puesto con contrato temporal y jornada flexible. El salario anual bruto oscila entre 22.500 € y 26.000 €.