Trabajo de recepcionista en un hotel. Las tareas principales incluyen la atención y el recibimiento de los visitantes, tanto en persona como a través del teléfono y el correo electrónico. También se requiere gestionar la agenda, organizando citas y reservas para los clientes. Además, la posición implica la gestión administrativa de pagos y la facturación, así como la resolución de posibles problemas o incidencias que puedan surgir. Es importante la coordinación con otros departamentos del hotel para asegurar que el servicio sea productivo y que los clientes tengan una experiencia positiva durante su estancia. Se ofrece un contrato indefinido con jornada completa. Se requiere una formación de Grado Medio o Superior en Administración y es imprescindible tener el carnet de conducir tipo B.