Brindar atención y asistencia sanitaria de alta calidad, cubriendo tanto urgencias como visitas programadas. Esto implica la colaboración con la Seguridad Social para el seguimiento de pacientes con patologías de origen no laboral. Se espera la toma de decisiones médico-administrativas, la elaboración de informes detallados y propuestas de alta, además de la planificación de actuaciones terapéuticas orientadas a rehabilitación y otras intervenciones especializadas. La solicitud de pruebas diagnósticas y la creación de historias clínicas son parte fundamental de la labor, junto con la investigación clínica para la resolución de casos. La participación en sesiones clínicas y bibliográficas, la preparación de publicaciones y formaciones interasistenciales, así como la detección y propuesta de acciones de mejora continua, complementan las responsabilidades del puesto.